El código disciplinario, como mecanismo disuasorio para evitar que se llegue al ámbito penal, no funciona
MADRID. Solo uno de cada diez expedientes disciplinarios abiertos en las Fuerzas Armadas por acoso sexual acaba en sanción para los denunciados, mientras que los procedimientos penales instruidos por el mismo motivo en la jurisdicción castrense concluyen en condena en uno de cada cuatro casos. Así figura en el último informe del Observatorio de la Vida Militar, un órgano dependiente de las Cortes Generales e integrado por expertos independientes pertenecientes a distintas disciplinas.
Según la memoria del citado organismo público correspondiente al año pasado, en el periodo comprendido entre 2016 y 2022, se tramitó un total de 219 denuncias, que dio lugar a 269 procedimientos. De estos, 112 fueron penales y 157 disciplinarios. La primera consecuencia que se observa en los datos facilitados por la Dirección General de Personal del Ministerio de Defensa es que el número de denuncias durante el periodo analizado oscila entre las 20 presentadas en 2016 y las 39 en 2021. Esas cifras constatan, según el Observatorio de la Vida Militar, la confianza de las Fuerzas Armadas en su Protocolo contra el Acoso Sexual, dado que prácticamente la totalidad de las víctimas acuden, desde el primer momento, a las Unidad de Protección frente al Acoso (UPA), un órgano que se configura como unidad externa a la cadena orgánica de mando e integrada en cada jefatura de personal y en el órgano central, como autoridades con potestad sancionadora o de decisión a altos niveles.
No obstante, el análisis de los datos facilitados por la Dirección General de Personal del Ministerio de Defensa revela que el código disciplinario, que castiga los casos menos graves, no está funcionando como mecanismo disuasorio para evitar que se llegue al ámbito penal. Los expertos advierten de que los delitos de acoso no suele ser episodios aislados, sino que con frecuencia se llega a ellos como culminación a una escalada de conductas abusivas que podría atajarse en sus inicios con una mera sanción disciplinaria, desde un arresto a una simple reprensión.
Sin embargo, de los 157 procedimientos disciplinarios por acoso sexual abiertos en estos siete años, el 63% fueron archivados sin responsabilidad alguna. Si se excluyen los 36 expedientes que aún están en trámite y cuyo desenlace resulta incierto, solo el 10,7% de las denuncias (13) acabaron con una sanción. En otros ocho casos se cambió la calificación, lo que significa que podría haber castigo para el expedientado, pero no por acoso sexual sino por otra falta distinta.
Hay que tener en cuenta que una misma denuncia puede dar lugar a dos procedimientos. Esto se produce cuando, iniciado el procedimiento disciplinario, la jurisdicción considera que los hechos pudieran ser constitutivos de delito. En estos casos, el procedimiento disciplinario no se archiva, sino que se suspende hasta que finalice el proceso penal. Si los hechos denunciados fueran objeto de condena penal, el disciplinario se archivará, pero si no hubiera responsabilidad penal, el disciplinario se reanudará, para determinar si existe infracción disciplinaria. Esta es la razón de que en el cuadro superior se observe que procedimientos disciplinarios antiguos se encuentran en tramitación. También se aprecia cierto retraso en algunos procesos penales que, conforme a lo informado la Fiscalía Togada, se debe a la complejidad del proceso.
El cuadro refleja las denuncias por acoso sexual que posteriormente cambian de calificación, cuando el órgano judicial considera que los hechos constituyen otro tipo de delito o cuando la autoridad disciplinaria estima que los hechos no son constitutivos de acoso, pero sí de otro tipo de infracción. En el cuadro se incluyen los procedimientos disciplinarios y las denuncias archivadas tras la información previa prevista en el art. 43 1 de la Ley Orgánica 8/2014, de 14 de diciembre, de Régimen Disciplinario de las Fuerzas Armadas.
En el año 2022, se presentaron 38 denuncias que han dado lugar a 47 procedimientos: 18 penales y 29 disciplinarios. De los 18 procedimientos penales, uno se archivó y cuatro cambiaron de calificación. Respecto a los 29 disciplinarios, nueve se archivaron y dos cambiaron de calificación. Los datos de las víctimas agrupados por escalas y sexo son:
– Sexo de la persona denunciada (en 38 denuncias concurren 42 presuntos acosadores):
- 41 hombres.
- 1 mujer.
– Sexo de la víctima (en las 38 denuncias concurren 40 víctimas):
- 35 mujeres.
- 5 hombres.
– Escala de la persona denunciada:
- 6 de la escala de oficiales.
- 9 de la escala de suboficiales.
- 27 de la escala de tropa y marinería.
– Escala de la víctima:
- 3 de la escala de oficiales.